Confusión

Hola, a ver que te digo.

Aunque llegaste a mí sin haberte llamando,

Pensaba que solo se trataba de diversión. 

Ya sabía de tu existencia 

Y nunca te tomé en serio. 

Nunca pensé en las consecuencias de ir de flor en flor sin protección 

Y ahora vives conmigo, me he convertido en un peligro 

Para la sociedad, me consumes.

A parte de mi vida también consumes 

La de mis seres queridos, ¿Qué hago? 

¿Ahora qué hago?  Tan solo debo 

Aceptarlo así sin más. 

¿Debo aceptar que no puedo hacer nada más que llorar? 

¿Debo quedarme aquí sentado y esperar? 

Te lo confieso, te confieso que tengo miedo. 

Tengo miedo de ir de este mundo sin vivir mi sueño. 

Ahora todos los días son un trago amargo. 

Cada abrazo que recibo lo siento como el último. 

Vivo asustado, desesperado, humillado 

Aunque haga lo imposible para no pensar en ello. 

El Hospital siempre me recuerda que soy otra víctima del VIH, 

Un número más de los afectados. 

Avergonzado con temor a la intimidad, temor a morir, 

Intento digerir este mal trago. 

Intento convencerme que lo que me ha pasado 

Es por no haberme protegido.




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