NOS QUIEREN VIVAS, PERO CALLADAS.

 

Mientras que los actos de violencia contra la mujer son justificables por la tradición y creencias religiosas o dogmas bajo la firma de nuestras costumbres, seguiremos llorando a nuestras hermanas, hijas, amigas, tías y madres: A día de hoy es más difícil vivir sin experimentar un grito en una esquina:

Tan desmotivada es abrir las redes sociales, la primera noticia que te topas es la de -muere una mujer por maltrato, violada una niña de doce años, desaparecida dos menores y cuerpos humanos en congeladores su excelencia, hallado menores en las fosas de agua que consume la comudad con indicios de torturas físicas, ancianas abandonadas en las calles, minorías sexuales bajo terapias de conversión- todas estas costumbres son de violencia. LA TRADICIÓN CATÓLICA, SU INFLUENCIA EN LA CONFORMACIÓN DEL ROL DE LA MUJER EN LA FAMILIA TRADICIONAL COLOMBIANA Y SU RELACIÓN CON LA VIOLENCIA DE PAREJA

En cambio, como disciplina social al hombre, pese a estas condiciones deplorables, se mantiene el orgulloso Bantú, con  ‘’fobias a todo lo occidental’’, merienda la famosa fras “No soy blanco, ellos sí permiten tonterías. ¿Desde cuando las mujeres son autoritarías?... Dios no es un tonto”; es decir, las mujeres son niñas pequeñas y hay que tener siempre el palo entre manos, gritos entre dientes y fuerza ejercida para que obedezca. Ninguna etnia ecuatoguineana es exenta a los maltratos de la mujer, mediante esa mísera sensación que cada vez más por lo mucho que no se quiera aceptar que las mujeres en Guinea Ecuatorial no están protegidas: ¿Quién está a salvo en la sociedad Ecuatoguineana? Una pregunta reflexiva a la que hasta ahora no hay respuestas. La violencia no debe ser costumbre .

Sin embargo seguimos viviendo en una carnicería humana cuerpos bajo cicatrices, algo que socialmente se normaliza, entre más que se las callan, resultados y vivencias constantemente atestiguamos.

Cada vez más hay leyes que amparan los derechos de la mujer en el mundo internacional, por lo contrario, solo se vive otra gran realidad localmente, se convencen en mantener sus raíces tradicionales de positividad a los maltratos humanos en especial la vulnerabilidad de las mujeres y minorías sexuales: A modo que, la crianza social las mujeres son seres sin autoridad personal, por la que hasta hoy en día van en la lista de bienes materiales del hombre.

Es más duro ser mujer en Guinea lo peor es que existe un paraguas de protección a las mujeres supuestamente, que no solo hace entender a las mujeres que, hagan lo que hagan no olviden qué dice la tradición y cómo deber de una mujer africana digna. -¿Dónde está esa dignidad cuando vemos hombres asesinando y torturando a mujeres de algún modo?- Dando razones de siempre -‘’me ha sido infiel, no me cumple como debe ser, ella se lo merece porque es mi mujer y puedo hacer lo que quiera con ella´´- .Tradiciones culturales y legitimación del poder masculino

Contextuando estas razones tristemente excitan una puerta de continuidad como ejemplo para que otros hagan lo mismo y que solo tengan alguna razón; la mera culpabilidad es ausente, la mayoría asesinan y se entregan en las gendarmerías o comisarías, exponiendo que estaba borracho, tiene malos espíritus, este enfermo, para más tarde ser liberados como si no hubiera pasado nada. 

 

Hay que destacar, muchas de las mujeres el rostro se les refleja de pánico y altamente amenazadas por no expresar lo que pasan después de cerrar la puerta o entre círculo familiar y social.  Algunas de las consecuencias que crean estas actuaciones y el silencio de las víctimas en una explicación (No importa al final les darán la razón), desde luego las normas bíblicas respaldando el linaje de la violencia´´ una mujer sin hombre es un ser sin dueño, mujer ser sumisas de vuestros maridos´´ partiendo desde las normas etno-tradicionales volvemos encontrar que ´´ una mujer sin hombre a su lado es un ser sin cobijo´´, con eso el linaje crece a diario.

por otro lado, también existen las carencias masivas de bienestar humano, es decir la independencia económica, falta de educación por la igualdad de derechos y oportunidades, ausencia de la justicia por los delitos de odio hacia las mujeres y minorías sexuales.

El desempleo como eslabón de la dependencia económica, las tarifas elevadas al comercio tradicional ‘’LA DOTE’’ hacia las mujeres, a veces es agobiante escuchar en las bocas de otras mujeres y hombres que todo lo que está pasando, ellas son responsables fácilmente podemos expresar razones, pero al no tener consciencia de más allá de las cosas o la responsabilidad de esos delitos acabamos enterando a nuestras hermanas, madres, hijas y amigas culpa ninguna tienen; si no hay justicia ejecutiva, reforzamiento formativas sobre cómo reducir dichas actitudes, queda por hecho que estamos a la deriva de vulnerabilidad solo vive el más fuerte de armas violentos quién sabe si nos callamos como lo hicieron nuestras madres y abuelas.

En definitiva ciertas opiniones  o situaciones, tienen origen a la normalización de tratos deperticiados bajo sustento de versículos bíblicos Qué formas adquiere la violencia de género en las iglesias evangélicas – UNCiencia con inclinación de sumisión por la obediencia ciega que interpusieron a las mujeres como honor a LA VIRGEN MARÍA LA MUJER QUE MUCHAS ACLAMAN, NUESTRA HERMANA LA CALLADA DIGNA, cuando las personas viven duramente intrigadas a las tradiciones torturadoras de vidas humanas, les resulta caro empatizar el daño que están haciendo. Una sociedad igual es un escenario de terror por el nacimiento de las mujeres.

NOS QUIEREN VIVAS, PERO CALLADAS.

Redactora: Cristina Guadalupe Eyenga

Comentarios

Entradas populares